El erotismo en Los nombres del aire (1987), es abordado desde diferentes aristas, pero desde una perspectiva que intenta liberar nuestros estereotipos y tradiciones occidentales respecto a cómo se “debe” vivir la sexualidad. Lo atractivo en su obra no sólo proviene de su particular manera de narrar, también surge de lo pertinente de su estética y su temática, pues deseo, mujer, cuerpo, ciudad, tradición, cultura, religión, identidad, son piezas inseparables de su producción literaria. Respecto a la figura femenina y su manera de vivir el erotismo, la propuesta de nuestro autor resulta interesante en estos tiempos, donde las mujeres continúan tomando acciones para reivindicar sus derechos y deseos. Ruy Sánchez nos presenta en su novela a mujeres de la cultura islámica, cuya herencia palpita fuertemente en la nuestra y que, en un lugar sin tiempo como lo es Mogador, pueden hacer valer su sexualidad de manera que aún en este siglo es motivo de discusión y reflexión. |